La Caja Metropolitana de Lima empieza a reposicionarse como una entidad emergente en el ámbito, cada vez más competitivo, de la industria microfinanciera peruana.

Efectivamente, la Caja Metropolitana de Lima, está ingresando con fuerza en los diversos mercados del país, siendo una entidad básicamente limeña, alcanza ahora, nuevos y más clientes en todo el país, según refiere la gerente de Negocios, Sandra Paredes Núñez-Melgar.

La institución, próxima a cumplir 70 años, viene  superado numerosas crisis y obstáculos que le ha tocado vivir, y ahora con nuevos bríos, se reposiciona como “La Caja de Todos” que está presente en la vida de los emprendedores peruanos.

“El recurso más importante de la institución es la persona humana, por esa razón, nos esforzamos para capacitar y entrenar a todos los colaboradores, a fin de dar un mejor servicio a todos nuestros clientes”, argumenta la funcionaria.

En opinión de Edwin Gamarra Novoa, gerente de Banca Minorista de la institución, cada vez son los emprendedores de la micro y pequeña empresa a quienes la caja metropolitana llega para atender sus necesidades de ahorro y financiamiento, razón por la cual es uno de los sectores más dinámicos que apoya directamente es a la micro y pequeña empresa.

La caja ha logrado una buena performance en sus carteras de colocaciones y captaciones, mejorando, incluso, la morosidad de años anteriores. Tiene por finalidad fomentar el ahorro, desarrollar el crédito de consumo en las modalidades de préstamos pignoraticios, personales y por convenio, concediendo adicionalmente créditos a la micro, pequeña empresa y mediana empresa.

Sin embargo, adicionalmente realiza operaciones como la captación de ahorros del público, opera con moneda extranjera y efectúa cobros, pagos y transferencias de fondos; pagos de servicios básicos (luz, agua, entre otros.); también emite giros contra sus propias oficinas y bancos corresponsales, actúa como fiduciario en fideicomisos, efectúa préstamos en general y emite cartas fianzas.

Para Sandra Paredes, los logros se van consiguiendo paso a paso porque como entidad financiera, también vivió la contracción de la economía peruana de los años anteriores, pero ahora con buen manejo y una eficiente gestión, la situación se viene revertiendo en forma sostenida logrando las metas de acuerdo al plan estratégico establecido.

Es importante reconocer que la Caja Metropolitana es una empresa especializada en otorgar créditos pignoraticios al público en general, encontrándose también facultada para realizar operaciones activas y pasivas con los concejos provinciales y distritales y con las empresas municipales dependientes de los primeros, así como para brindar servicios bancarios a dichos concejos y empresas.

La visión de la institución es contribuir al desarrollo económico del país a través de la profundización financiera, apoyando el desarrollo integral de personas y empresas, conjugando excelencia en el servicio y rentabilidad para los accionistas.

Sandra Paredes Núñez-Melgar reveló que el talento humano por ser el más importante en la organización, constantemente es capacitado en temas de gestión y valores corporativos.

Precisamente, esos valores corporativos son el compromiso, servicio, flexibilidad, calidad y dinamismo. Mediante el compromiso se busca que los trabajadores estén identificados con la organización y practicar la solidaridad, respeto, lealtad y ayuda mutua para alcanzar las metas institucionales.

Con respecto al servicio se pretende practicar una cultura de calidad en el servicio a los clientes y compañeros de trabajo, demostrando oportunidad, cordialidad y sincero interés en la atención de sus requerimientos. En lo que se refiere a la flexibilidad, es estar dispuestos al cambio, aportando creatividad en el desarrollo de las actividades, generando productos y servicios que permitan fidelizar a los clientes y captar nuevos mercados.

La Caja Metropolitana de Lima, busca realizar el trabajo diario con orientación permanente a la calidad y el mejoramiento continuo, optimizando recursos y tiempo con el objetivo de alcanzar las metas programadas, y realizar las acciones que se solicitan con rapidez y prontitud.

EL APUNTE
La Caja Metropolitana de Lima se creó el 20 de enero de 1947 y es propiedad de la Municipalidad Metropolitana de Lima. Tiene autonomía económica y financiera y se rige por la Ley General del Sistema Financiero y del Sistema de Seguros, es supervisada por la Superintendencia de Banca, Seguros y Administradora de Fondos de Pensiones y por las disposiciones establecidas por el Banco Central de Reserva del Perú y la Contraloría General de la República.

Mediante el compromiso se busca que los trabajadores estén identificados con la organización y practicar la solidaridad, respeto, lealtad y ayuda mutua.

Se pretende practicar una cultura de calidad en el servicio a los clientes, demostrando oportunidad, cordialidad y sincero interés en la atención de sus requerimientos.

Se busca realizar el trabajo diario con orientación permanente a la calidad y el mejoramiento continuo, optimizando recursos y tiempo con el objetivo de alcanzar las metas programadas.