ES NECESARIO FORTALECER A LAS MYPES Y AL SECTOR MICROFINANCIERO

Escrito por Microfinanzas. Publicado en Diciembre 2021

Por: Wilder Mayo Méndez, Director de Micro Finanzas
Las micro y pequeñas empresas formales e informales se vieron muy afectadas por la crisis de la salud generada por la Covid-19. Según información del INEI a finales de 2020, se registraron aproximadamente 3.1 millones de mypes distribuidas a lo largo del territorio nacional, un 48.8% menos que en 2019. Esto demuestra el gran impacto dentro del rubro empresarial, pero también revela un mecanismo de transmisión de la crisis económica hacia los hogares que subsistían con los ingresos generados por las mypes.
Si bien el 2021 se recuperó paulatinamente el dinamismo de la economía, son las mypes las mas afectadas por las medidas en torno a frenar el avance del Covid-19. La gran mayoría de las mypes permanecen activas, pero enfrentan dificultades como un flujo de caja reducido, alto endeudamiento y retrasos en el pago de compromisos.
Aunque la actividad económica ya se está recuperando, persisten los riesgos para las mypes, incluidas las nuevas amenazas de las olas de contagio de Covid, el aumento de las tasas de interés y la inflación, y el endeudamiento generalizado. También existen riesgos de cicatrices permanentes en la productividad y competitividad.
Durante el 2021, el gobierno continuó con sus programas de ayuda, pero lamentablemente no llegaron a tiempo a los que mas lo necesitaban, las mypes. Se reprogramaron las deudas bancarias, se redujeron los impuestos y se crearon programas de apoyo al empleo y garantías crediticias. Todo esto requirió montos presupuestarios extraordinarios y un mayor endeudamiento público. Se puede decir, con una pizca de satisfacción, que la misión se cumplió. Aunque solo parcialmente.
Esto se debe a que ahora nos enfrentamos a una segunda fase que consiste en dejar de apoyar la supervivencia y el crecimiento de las mymes. Pero las necesidades que tenemos por delante son muchas y valdría la pena destacar al menos tres. La primera es que el acceso a los servicios financieros sigue estando restringido. Incluso antes de la pandemia, las pymes ya enfrentaban graves dificultades para acceder a los servicios financieros y pagaban tipos de interés que podían ser hasta tres veces superiores a los de las grandes empresas.
Otra necesidad es la educación y alfabetización financiera. La evidencia empírica reciente también muestra que la educación financiera limitada ha sido un obstáculo mucho mayor de lo que se pensaba anteriormente para explicar las recesiones y dificultades en la recuperación de las pymes, lo que requiere la intensificación de los programas de capacitación y asistencia técnica. Y un tercero es el acceso y la formación para la transformación digital y para las nuevas tecnologías productivas y la gestión de la producción, que son factores cada vez más determinantes para la productividad y competitividad de las pymes.
Por otro lado, adentrándonos en materia financiera y específicamente en la reprogramación de los créditos a las empresas, se postulan una serie de desafíos para las MYPES, las cuales han sufrido efectos adversos en los indicadores de calidad de cartera. Según la SBS, esto se debe esencialmente al vencimiento de los periodos de gracia de los créditos reprogramados y el deterioro de la capacidad de pago de los clientes por efecto de esta coyuntura (2021). Asimismo, se estima que los créditos reprogramados han ido disminuyendo sustancialmente y de forma sostenida desde el 2020. De acuerdo a la SBS, el año pasado, estos créditos llegaron a representar el 36 % de los créditos directos y a la fecha solo representan el 17%(2021). Los desafíos para las MYPES recaen en seguir fomentando el consumo a través de nuevas estrategias y cumplir con sus obligaciones financieras en los tiempos establecidos para mitigar los posibles efectos a largo plazo de la deuda.
FORTALECER A LAS MICROFINANCIERAS
A pesar del crecimiento económico sostenido e importante que ha tenido el Perú en los últimos 20 años, la accesibilidad a los servicios financieros sigue siendo un tema pendiente. Es importante ampliar la cobertura y profundización de los servicios financieros para lograr que todos los segmentos de la población estén en la capacidad de acceder a ellos y utilizarlos. De esta manera será posible mejorar el bienestar y calidad de vida de toda la población. La banca no cuentan con todos los productos que puedan satisfacer las necesidades de las pequeñas empresas o pequeños emprendedores.
No obstante, existe un sector importante que atiende a las necesidades de los microempresarios: las microfinancieras. Dentro de ellas se encuentran las cajas municipales, las cajas rurales y otras similares. El rol que han adoptado en los últimos años para facilitar el acceso a las personas ha sido bastante importante.
En general el sector microfinanciero permanece fuerte, sin embargo, son las entidades mas pequeñas las que se están viendo afectadas fuertemente. Por un lado, debido al tope de las tasas de interés, pero además por el retiro de la CTS. El 20% de los depósitos que reciben las cajas rurales y las cajas municipales provienen de los depósitos de cuenta CTS. Si las personas empezamos a retirar eso –que estamos en todo el derecho de hacerlo dado que la ley lo permite–, hay un efecto que va a caer sobre el financiamiento que ofrecen dichas entidades a las empresas.
Hay que pensar en el mediano y largo plazo cómo hacemos para fortalecer a este sector importante de las microfinanzas que logra cubrir un segmento sustancial de la población. Cómo hacemos para que no se vea tan afectado por medidas populistas, que al parecer no toman en cuenta todos los aspectos.